Sunday, May 13, 2012

Poesía masculina?



 En varias ocasiones me han hecho la pregunta respecto al género de la poesía, es decir, que si existe una poesía femenina. Mi respuesta rotunda es no. No existe una poesía masculina, femenina  u homosexual. Para nada. Va más allá de los sexos. Y ante los epítetos Poeta y Poetiza (poetisa) habré de mencionar que: poetiza, es el acto de hacer poesía. Poetiza el Poeta. Poetiza la Poeta.

Por eso traigo a la memoria y a este espacio a poetas hombres, para acallar infundíos. O citaremos a otros, que nada tiene de particular su preferencia sexual ante la pluma y el sentimiento amoroso y creativo de hacer Poesía. Esa que nos salva, que cura. Que es una bendición.

Conocí a Eduard Reboll en una de las FIL Guadalajara.
Procedente de Barcelona—Miami en el año 2009
Presentaba su libro de Poesía La Lírica del crápula

 Mujer y habitación con vistas

 Abres mi cremallera
y yo cierro tu género con plata
no tardando el gemido en oírse
después de que mis manos dialogaran
en tu indumentaria de piel y clavos:
El deseo y  las calles fueron uno.
Apoyada en la cornisa, mientras eludías
como ciega al público del lugar,
un espejo contempla desde el suelo
las gotas de viveza que lentas desplazabánse
por el marco dorado de nuestra tarde de junio
Fue la altura un sustento
en aquella habitación con vistas a la plaza

Hubo dos escenas junto a nosotros:
La senectud
…y la rutina de los miércoles.

Dante Medina de Jalisco, por otro lado, aborda también lo cotidiano, nos lo cuenta en una

Carta del que todavía no se arrepiente

Dios:
Soy malo con mi mujer
¿Qué hago?
No te escribo para que de un toque milagroso
me conviertas en santo
Nomás quítame las ganas
de pegarle a mi mujer
Es todo lo que pido, y es mucho
Porque sabes? Me encanta pegarle
A veces ya mejor la mando para la iglesia
para que se refugie de los golpes
que de todas maneras le he de dar
por vida de Dios!
Pero con tu ayuda diosito,
ya se me van a quitar las ganas de pegarle
Por favor, a vuelta de correo, dime cómo
Te prometo que te lo voy a tomar a milagro.

Heriberto Yépez, de Baja California resulta más irreverente, pero igual de explícito y franco, condición indispensable en las Letras. El lector lo  percibe.
HACER EL AMOR CON MUJERES
ME DABA FRIO
POR ESO QUISE PROBAR BOCAS
MASCULINAS
(Al final concluye el poema):
PERO RESULTO LO MISMO.

La poesía es un acto de amor, de desnudes, de valentía y de compartir sentimientos con el Lector y por lo tanto es una cuestión humana. Sin género. Mientras tenga ritmo, belleza. Que nos conmueva.