Heriberto Yépez

Agudo como es, el escritor Heriberto Yépez en su blog HACHE postea esta entrada que transcribo: PAPA EN LA CULTURA

Papá en la Cultura, papá de quienes y de cuántos?
Papa en la Cultura, asi sin acento, significarían dos cosas:

1.- El Cecut es la casa Papal? se circunscribe a los católicos la Cultura?

2.- En mi rancho diríamos eso de alguien que no sirve para nada, que es una papa enterrada...

Cuál Papa Cultural nos estarán señalando?


El post de Yépez es este:

El sábado pasado publiqué en mi columna de Milenio que todo indicaba que la permanencia de Virgilio Muñoz, en mi opinión, tiene mucho que ver con el cariño (sometido) que se tiene hacia la figura del "padre" autoritario. Un día después, en el diario tijuanense El mexicano apareció —en la sección de Sociales— una entrevista con Virgilio Muñoz como "Papá en la cultura", donde habla de su ser padre, para que los Tijuanenses le agarren "cariño"... Y para que no Quede Duda de que tiene que ver con la Cultura, se le toma fotos rodeado de libros, posando leyéndolos. La neta, sólo faltó una foto con un globo terráqueo.

De cualquier manera, agradezco que apenas 24 horas después de mi columna y mi tesis, la hayan confirmado a ocho columnas. ¡Papá en la Cultura!



Y es que, en serio, cuando tengamos una mejor definición del padre en este país, dejaremos de defender, imponer o justificar funcionarios de este tipo.

Mientras esto no cambie, habrá personas que defiendan esta clase de funcionario público que corresponden a eras pretéritas (y ridículas) en que al ciudadano se le quiere tratar de modo infantiloide por prensa y gobierno —nótese, por ejemplo, cómo Muñoz constantemente alude a los "jóvenes" que imagina que se le oponen por todas partes o los "niños" que menciona a cada rato en sus entrevistas—, mientras esta idea de la autoridad no cambie seguiremos hundidos en el tercer mundo.