Daniella Almazán publicó que sus alumnos no sabian quien fue La Malinche...
Las cosas estan peor de lo que parece. En la UABC también se dio a conocer que dejarán de enseñar Historia de la Conquista Española, La Colonia, Guerra Cristera y determinados temas especificos. Diría incómodos...
De por si la Educación en México está para llorar. Habrá que agradecerle al Gobierno del Cambio también esto? Ojalá sean vanos intentos del Estado por crear robots humanos. Sin memoria.
Volverá la trasmisión oral de la información en la Era de la Cibernética? La Educación Lancasteriana será retomada? La cuestión es que no somos ni seremos ya los mismos gracias a la Tecnología.
El Demonio mayor Marcial Maciel parece buen tema... me engarzaron al Blog un comentario defensor de este personaje oscuro. Por eso posteo lo que sigue:
Confieso que quise ser Monja. Senti un llamado espiritual en mi adolescencia, afortunadamente mi padre lloró y no me dejó ir. La verdad opino que las religiones nos tienen bien jodidos con las culpas y los pecados. A medida que crecí me sorprendia más y más de la mentira de la que está rodeada esa grey, en especial la católica, aunque ninguna se salva.
Valparaiso, Zacatecas fue un poblado incitado a la Guerra en nombre de Dios durante la Cristiada. Mi familia sufrió los estragos de esa masacre. Las tenebrosas historias de monjas abortando, de cementerios clandestinos atestados de fetos, eran la comidilla no tan acallada, y de tantos relatos extraños e increibles de manifiesta maldad de los servidores de la Iglesia.
Tengo familiares cercanos de catequistas, de Caballeros de Colón, y Damas de la vela perpetua, y yo haciendo mención de la familia del Padre tal... con acusación de blasfema por parte de mi madre. No se puede tapar el sol con un dedo. Otro célibe de la Iglesia asistia con regularidad a echarse sus chelas a un Bar, y creyendo que nadie lo sabria enseñaba la foto de su novia, causa de su tristeza...
Les puedo mencionar el caso del padre biológico - también sacerdote-, de una conocida, a quien desgració la vida desde niña, pues nunca quiso reconocerla. En Pueblo chico, como era Ensenada, todos sabiamos que aquellos otros alegres muchachos eran los hijos del Padre Luna. Y asi, puedo hacer una larga lista. Tienen derecho. Pero que no se escuden en la mentira.
Me acaba de contar mi maestro de Teatro que a su prima la acompañó la mismisima madre superiora, hace poco, para entregarla a la casa materna, pues en El Vaticano dio un mal paso; no por lo resbalozo del suelo, sino porque salió embarazada y vinieron a regresarla, exigiendo un silencio sepulcral de lo acontecido.
Morbosos como somos, nos preguntamos donde fue donde la sedujeron... si en los pasillos, frente
al altar, en las oficinas sobre los escritorios, tras una columna de mármol, o dónde? pero obtuvimos un silencio total, como si le fuera en ello la salvación de su alma. Cubrir al victimario.
Como dice la canción: a mi, mejor que me lleve el Diablo
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