El amor es un Río; corre impetuoso a causa de las tormentas. Arrastra piedras, derriba árboles, va imparable, nada es capaz de detenerlo. Nos atrae para que seamos cómplices de su pasión, y nos lanzamos al torrente sin miedo, en carrera loca. A veces preferimos caminar por la orilla de ese Río. Somos observadores maravillándonos de su majestuosidad. Luego llega el momento en que se apacigua, hay dulce placidez, —ese remanzo del amor es delicioso elixir—.
No deja de cantar ese Río su canción de amor. Es bramido o trino de pájaros azules, y sigue sendo el mismo Río.
2 comments:
Son etapas de la misma travesía; somos ese río y la pasión la correntada. Logra vencer cualquier vallado, fluye y arrebata. La pasión es la flecha y el objetivo en si misma.
Saludos.
Un río que nos llama siempre a bañarnos en sus aguas, que fluyen sin detenerse, que nos embriagan, nos ahogan, nos arrastran, nos llevan de aquí para allá, nos muestra puertos y ciudades, lugares lejanos, lugares cercanos.
El amor es ese río y por el nada la humanidad, muchas veces contra la corriente, lastimándose y lastimando a todos.
Un saludo.
HologramaBlanco
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